La caldeirada de raya es un plato tradicional de la cocina gallega que destaca por su sabor delicioso y su simplicidad a la hora de elaborarlo. Se trata de un guiso de pescado que te transportará a Galicia ya que une dos de sus productos estrella: el pescado y las patatas gallegas.
Aunque la raya no es un pescado muy consumido en España, en Galicia es muy común, especialmente en la zona de las Rías Baixas. Es un pescado muy sabroso, de carne blanca y sin espinas, ya que su estructura es cartilaginosa y no posee ni esqueleto, ni espinas. Generalmente para este guiso se utilizan las alas de la raya.
Te ensañamos como hacer esta deliciosa receta de Caldeirada de raya, o Raia en caldeirada (en gallego) o simplemente Raya a la gallega.
Este producto es una de las novedades de la empresa gallega Mariskito que sirven pescado y marisco fresco a toda España pescado de las lonjas gallegas en 24 h.
¿Qué es el unto?
Vamos a utilizar un ingrediente muy gallego, el unto, una grasa blanca que recubre las tripas del intestino delgado del cerdo. En las matanzas, esta grasa se extrae, se sala y se enrolla formando un hatillo con forma de cilindro. Luego se cuelga y se deja secar en un lugar fresco hasta que pase el tiempo adecuado para su consumo. Generalmente se seca en las cocinas, dejando que se ahúme y por eso algunos untos son blanco-amarillentos.
Es un ingrediente muy utilizado e importante en la elaboración de platos tradicionales de Galicia como el caldo gallego, el cocido gallego o para preparar ajadas.
[Aquí puedes ver el Vídeo para hacer la receta]
Receta de Caldeirada de Raya
Ingredientes
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Elaboración de Caldeirada de Raya. Paso a Paso
Preparación de la Ajada
Emplatado Caldeirada de Raya
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Trucos y consejos
Cuando partas la raya no conviene hacer trozos pequeños, porque pueden deshacerse en la cazuela. Pártela siempre en trozos grandes.
Si no tienes unto, (que es difícil de conseguir fuera de Galicia. En Madrid yo sí lo he encontrado en algunas tiendas gallegas), fríe los ajos en aceite de oliva virgen extra.
La ajada la puedes servir en cada plato, directamente desde la sartén o bien echarla en una salsera y servirla en la mesa. También puedes añadirla directamente a la cazuela antes de emplatar, (pero tendrás que haber quitado el agua de cocción, pues las patatas se sirven secas). No es un guiso caldoso.