En verano la bollería apetece menos, pero ¿y si le damos la vuelta a este concepto y preparamos unas galletas de verano bien fresquitas? Sin hornear y listas en muy poco tiempo, además con fruta fresca y chocolate si azúcar. ¿Te animas a preparar unas galletas de frambuesa y chocolate frías?
Comer cosas fresquitas de la nevera es el deporte del verano. Te dejo otras opciones refrescantes como el tiramisú casero o los vasitos de chirimoya y granada o la compota de melocotón casera.
Esta receta la he preparado en colaboración con Asomafrut la Asociación de Mayoristas de frutas y hortalizas de Madrid que llevan la fruta y la verdura a los mercados municipales y fruterías que después llega a nuestras casas.
Receta de Galletas de frambuesa y chocolate sin azúcar
Ingredientes
- 250 g de frambuesas frescas
- 2 tabletas de chocolate para postres sin azúcar
- 2 cucharadas de copos de avena
- 50 g de pistachos
- 2 cucharadas de miel
Galletas de frambuesa y chocolate. Paso a paso
Elaboración
- Aplasta las frambuesas con un tenedor en un bol. Añade después los copos de avena.
- Parte los pistachos en trozos pequeños y añádelos a la mezcla junto con la miel. Mezcla bien los ingredientes
- Prepara en una bandeja montoncitos con la mezcla para hacer las galletas y congélalas durante 1 hora para que se pongan duritas.
- Funde chocolate sin azúcar, especial para postres en el microondas. El truco es fundirlo de 30 segundos en 30 segundos para que no se queme.
- Saca las galletas que estarán casi congeladas y báñalas en el chocolate fundido. Ponlas a enfriar en una bandeja con papel secante. En 5 min estará endurecido el chocolate. Habrás preparado unas galletas de frambuesa y chocolate, que estarán duras por fuera y muy blanditas por dentro. Ya verás que ricas.
Trucos y consejos
Puedes sustituir los pistachos por otros frutos secos como anacardos o nueces. Es para darle un toque crujiente.
Los copos de avena se utilizan como aglutinante, puedes utilizar chía en su lugar. Puedes cambiar la miel por otro endulzante, el que utilices habitualmente.
Es importante que estén casi congeladas las galletas y bien duritas antes de darles el baño de chocolate, que también puedes cambiar por tu chocolate favorito: chocolate blanco, chocolate con leche, etc.
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