En un lugar mágico, rodeado de bosques, verdes pastos y en la línea del horizonte divisando el mar, se encuentra Pico Velasco, un hotel boutique rural en Cantabria con mucho que ofrecer, tanto en la parte de hotelería como en la gastronómica.
La casona aislada de Pico Velasco está situada en una finca en el marco del Parque Natural de las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel. Un hotel boutique restaurado con un gusto exquisito que alterna la arquitectura original en la fachada, ejemplo de la arquitectura civil cántabra del siglo XVII, con zonas vanguardistas en el interior, como las paredes de hormigón o la escalera interior de diseño minimalista.
Mandada levantar en 1653 por Francisco Velasco y Alvear, el primer marqués de la estirpe de los Pico Velasco, uno de los linajes medievales más poderosos de Castilla. Su historia reciente está vinculada a Herbert Diess, ex-CEO del Grupo Volkswagen, quién se enamoró de Cantabria cuando trabajó como director de la planta de Robert Bosch en Treto. Su pasión por este entorno idílico hizo que comprase junto a su mujer Irene esta casa histórica convertida ahora en un hotel de lujo.
La dirección de Pico Velasco corre a cargo de Inés Aguirreburualde y la propuesta gastronómica la desarrolla el chef Ignacio Solana con 1 estrella Michelin en su restaurante Solana.
[Desde aquí puedes ver cómo es el interior del hotel]
Hotel Pico Velasco
Dispone de 11 preciosas habitaciones con vistas a la finca y a las marismas de Santoña. Desde la habitación, la terraza o el comedor del restaurante verás las vacas pastando en los prados y algunas veces hasta corzos, según nos contaron. Un entorno natural y relajado para disfrutar con tranquilidad.
La primera planta consta de 6 amplias habitaciones arquitectónicamente muy especiales. Construidas a 60 cm del edificio original, su nueva estructura interior de cristal permite que entre la luz natural, y una mezcla de historia y vanguardia sumergen al huésped en una sensación única.
En la segunda planta disponen de 5 espaciosas habitaciones acristaladas con vistas panorámicas dentro del Parque Natural. Todo pensado para el máximo confort del huésped, desde la calidad de los textiles a la comodidad de la cama.
Propuesta gastronómica
Además del refinado alojamiento, otro de los puntos fuertes de Pico Velasco es la gastronomía. Desde el desayuno hasta la cena se nota la dirección de Ignacio Solana en busca de la calidad del producto de temporada y sobre todo local.
Desayuno gastronómico
Para empezar el día con buenas vibraciones disponen de dos desayunos, uno más clásico con una tostada, café y zumo, por ejemplo, y un desayuno gastronómico, que bien podría ser un brunch por la variedad y las cantidades que te ponen. Nacho Solana es muy consciente de la importancia de un buen desayuno en nuestra alimentación y ha diseñado un desayuno gastronómico de lujo.
Productos cántabros de pequeños artesanos conforman la propuesta que empieza con una deliciosa mantequilla para extender en un surtido de panes caseros. Bollería recién hecha, sobaos y quesada pasiega, mermeladas artesanas, cereales, miel, zumo de naranja recién exprimido, fruta natural pelada, granola casera, frutos secos y yogur.
Un verdadero festín, solo para empezar, porque después viene el plato principal. Puedes elegir huevos benedict, Tosta de salmón y aguacate -fabulosa-, o Pisto de verduras ecológicas con huevo y jamón entre otras propuestas.
Cena en el hotel
Para los huéspedes disponen de un pequeño comedor con mesas altas dónde disfrutar de la cocina más tradicional de Nacho Solana. A la hora de la cena puedes pedir sus míticas croquetas de jamón, su famosa tortilla de patatas de huevos camperos poco cuajada o unas ricas rabas de calamar, entre otras sugerencias de la carta.
Restaurante gastronómico
Además del restaurante para las cenas, disponen de otro comedor -la joya de la corona- situado en la planta baja del edificio, con un ventanal que ocupa toda la sala frente a los prados y la marisma de Santoña. Solo bajar las escaleras (está excavado y a cota con el prado) y llegar hasta allí te transmite paz y relax.
Tiene 2 menús gastronómicos, uno corto y uno largo, denominados Albiar y Sincio. Dos palabras cántabras; la primera significa amanecer y hace referencia a los bellos amaneceres que se viven cada día desde Pico Velasco. La segunda, Sincio, expresa que se tiene muchas ganas de algo. Dos menús degustación que recorren los sabores cántabros en su versión más contemporánea.
[Desde aquí puedes ver cómo es el menú degustación]
Menús Degustación en Pico Solana
Hemos tomado el menú Albiar, pero con algunos platos de Sincio, al final no hemos hecho ni el corto ni el largo, más bien uno intermedio. Os avisaré de los platos que son de Sincio.
Los platos de aperitivo dan comienzo al menú Albiar con un bocado de Tomate, un pequeño tomate que viene pelado y con su propia agua totalmente natural. Sigue una Mantequilla de anchoas que no podrás parar de untar en el pan tan rico que la acompaña, untuosa y delicada. Las Setas, son un merengue seco de champiñón relleno de una duxelle de las mismas. Continúan los aperitivos con un Bombón de cerveza y foie.
Excelentes resultan tanto el Pimiento relleno de marisco, una elaboración sofisticada en forma de canelón de pimiento muy fino relleno de marisco, como la exquisita Croqueta de Solana, una de las mejores de España. Para finalizar los aperitivos sube aún más el nivel con el Tartar de Angus sobre una tartaleta de hojaldre salado. Muy bien aliñado y muy gustoso.
Seguimos con uno de los grandes platos del pase: Escabeche de verdel y perdiz. Una elaboración con contrastes marcados tanto de temperatura como de texturas y sabores que es pura magia.
Ahora vamos a tomar 2 platos del menú Sincio, en primer lugar Tallarín de calamar con guisantes lágrima y jugo de rejos con vermut blanco. Sorprende ver un calamar convertido en tallarines, pero me gustó el contraste con los guisantes lágrima.
En segundo lugar, Bacalao en tres tiempos: en brandada, en pavía y unos excelentes callos melosos y pegajosos de textura perfecta.
Seguimos con los platos principales de Albiar, uno de pescado: Trucha con sopa acidulada de vegetales, un pescado que a mí personalmente no me emociona, pero que Nacho Solana sabe trabajar muy bien sacándole toda su expresividad. Estaba rica la trucha.
Y de plato de carne, una elección arriesgada: Corzo con guiso de colmenillas, un plato bien ejecutado y que, a mí, que no soy gran consumidora de carne de caza me ha gustado mucho.
Postres de Pico Velasco
Finaliza el menú con unos postres cuidados y refrescantes, apegados totalmente al territorio. Por un lado, Hábitat Pico Velasco. Un postre muy refrescante de helado de limón con sopa de albahaca. Se elabora con limones de la propia finca ya que Pico Velasco esté repleto de limoneros a escasos metros del hotel.
Llega después un postre que preparan en mesa: Lácteos de Pico Velasco, que rinde homenaje a la tradición lechera de la zona. En la base del cuenco ponen leche caramelizada y encima cuajada de leche. La miel la aportan con una galleta de miel en forma de panal, que al romperla se mezcla con la cuajada aportándole el sabor inconfundible de la miel. Un postre muy logrado.
Pico Velasco lo tiene todo para convertirse en un imprescindible en Cantabria. Un lugar idílico y tranquilo para una escapada o una estancia larga, instalaciones de hotel boutique, una cocina de altura y un personal volcado en atender y agradar al cliente. Un descubrimiento que acaba de cumplir su primer año y que quiere seguir creciendo. Este verano van a montar una terraza para comidas y cenas que estoy deseando conocer.
Además está especializado en eventos corporativos, familiares y celebraciones privadas, incluso puedes reservar el hotel entero para tu evento.
PICO VELASCO
Dirección: Barrio Angustina S/n. Carasa. Cantabria
Teléfono: 842 841 111
Precio Menú Albiar por persona: 80€ + bodega | Precio Menú Sincio por persona: 102e + bodega